¿LEEN TU CORREO WEB SIN TU SABERLO?

TRUCO PARA SABERLO

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Consiste en subir un pequeño fichero de imagen (foto) a algún servidor en el que podamos acceder a los registros de acceso. La imagen ha de estar lo más escondida posible, para que nadie pueda acceder a ella por casualidad (y mucho menos a través de cualquier enlace).

A continuación, nos enviamos un mensaje a nuestra cuenta de correo web, conteniendo esa imagen incrustada (es decir, a modo de web bug) y con un asunto llamativo, que atraiga la atención de cualquier posible fisgón ("Su nueva contraseña”, “confidencial para..." o algo similar). El mensaje se deja en la bandeja de entrada sin abrir, para que pueda actuar a modo de cebo...

Cuando alguien abra el mensaje (esperemos que eso no ocurra nunca), la imagen será descargada desde nuestro servidor y dispondremos en nuestros registros de acceso no sólo del aviso, sino también de la dirección IP del fisgón y de la fecha y horas exactas en que se produjo ese acceso.